viernes, 26 de junio de 2009

Parto a Tumbuctú

Esta tarde parto a Tumbuctú. La ciudad legendaria, que resuena en mis oídos como lo hacía en los marineros del pasado el Cabo de Buena Esperanza, está a setentaicinco horas en autobús. Pienso ir esparciéndolas para que la falta de aire acondicionado no se me haga del todo pesada.

No sé si llegaré. Por un lado, acaba de comenzar la temporada de lluvias y durante ésta los autobuses no pueden llegar. Por otro, parece ser que el calor que hace es insoportable. Preguntándole a un Senegalés, me explicó:

“Cuando llegas a Tambacunda crees que hace mucho calor. Pero hace más calor en Bakel. Cuando llegas a Bakel crees que ya no puede existir más calor en el mundo. Pero te basta con llegar a Bamako para comprobar que estás equivocado. Si llegas a Tumbuctú en esta época del año, puedes decir con seguridad que sólo hace más calor en el infierno.”

Así que iré paso a paso, viendo como van las cosas y como me deshidrato. Ya contaré más cuando vuelva

2 comentarios:

  1. Gitano!!! Gran viaje! A ver que nos cuentas de 75 horas en el autobús del infierno! Me recuerda a una cita de Kipling (un poco tangencial, pero siempre he querido soltarla :D)

    "Down to Gehenna or up to the throne, He travels the fastest who travel alone."

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  2. ya te digo que tangencial. Pero es buena. Seguro que la has rebuscado en alguna antología de frases célebres

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